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Pagar con la huella digital

Pagar con la huella digital

Avanza en varios países la eliminación de los billetes en efectivo y también de las tarjetas de crédito y débito, que están siendo reemplazados por operaciones digitales vía smartphone o la utilización de la huella digital

Por Por Federico Kucher, Página 12, domingo 26 de marzo de 2017

 

 


La India tiene 1300 millones de habitante. Hay 662 millones de tarjetas de débito y 25 millones de tarjetas de crédito. Cuenta con unos 1000 millones de usuarios de teléfonos móviles pero sólo 300 millones tienen acceso a internet desde un celular inteligente. Las autoridades pretenden eliminar el dinero en efectivo y han encontrado una alternativa a la falta de plásticos y smartphones para garantizar las compras del días a día del conjunto de la sociedad. Decidieron transformar a cada uno de los habitantes de la India en un cajero automático ambulante. “Estamos en medio de un cambio sin precedentes en materia de tecnología financiera e innovación social. Los billetes en efectivo, las tarjetas de débito y crédito, los ATMs (cajeros) y las máquinas de POS pasarán a ser totalmente irrelevantes”, afirmó Amitabh Kant, un economista de la Universidad de Delhi que se encuentra a cargo del Instituto Nacional para Transformar la India.

 Para ello lanzaron un plan gigantesco de identificación biométrica de la población, con el que ya se han registrado a 9 de cada 10 personas de la India. Cada uno de estos individuos recibió un código de ciudadano de 12 dígitos (similar a un número de DNI), el cual quedó habilitado para vincularse con una cuenta bancaria. Eso le permite a las personas ir a un comercio y, tras identificarse, pagar utilizando la huella digital.

Los locales no tendrán otra opción que implementar lectores de huella digital. El gobierno de India retiró de circulación el 80 por ciento de sus billetes en los últimos meses y confirmó a principio de este año que para 2020 no circulará efectivo. Para que los habitantes, además de hacer compras, puedan transferirse dinero entre sí sin trasladarse a una sucursal con lectores de datos biométricos se ha contemplado un modelo de transferencias que también funciona en los celulares. El Estado les solicitó a los fabricantes de smartphones que cada uno de los equipos que se producen en el país cuente con un lector de huellas digitales. Esto le permite a un individuo poner los 12 dígitos de la persona a la que quiere enviarle plata y validar la operación con su dedo. Los indios no tendrán que lidiar con el dolor de cabeza de las contraseñas y sistemas de seguridad de doble autentificación de los bancos en Occidente.

Los sectores postergados de la población tienen una rápida capacidad de adaptarse al uso de estas tecnologías y no genera preocupación para las autoridades. “La gente pregunta qué pasará con los pobres. Las personas que viven en zonas rurales tienen una rapidez para incorporar las nuevas tecnología que muchas veces supera a la de personas alfabetizadas que viven las ciudades”, afirman en el Instituto Nacional para Transformar la India. El caso de Kenia, uno de los países de Africa de mayor vulnerabilidad, es categórico. Las tarjetas de crédito y débito en ese país nunca consiguieron masificarse y es una economía acostumbrada no sólo al uso de efectivo sino también del trueque. En 2012 se lanzó la aplicación M-Pesa para hacer pagos y transferencias de dinero con el celular. Vodafone, la segunda empresa proveedora de telefonía más grande del mundo, financió este proyecto y en tres años lo convirtió en el principal medio de pago del país. Las operaciones con M-Pesa ya superaron los 18 mil millones de dólares. La compañía exportó el modelo de negocios a otras economías como Afganistán y Rumania.

 

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